La Catedral del Cusco: Un Tesoro Histórico y Religioso
¿Sabías que en el corazón del Cusco se encuentra una joya arquitectónica y religiosa que ha cautivado a visitantes de todo el mundo? Prepárate para sumergirte en la grandeza y la historia de la Catedral del Cusco, un lugar que te transportará a épocas pasadas y te dejará maravillado con su belleza. ¡Acompáñanos en este viaje y descubre los secretos de este imponente templo!
La Historia que Envuelve a la Catedral del Cusco
La Catedral del Cusco, también conocida como la Basílica Catedral de la Virgen de la Asunción, es una de las construcciones más emblemáticas de la ciudad. Su construcción comenzó en el siglo XVI sobre el sitio del antiguo templo inca dedicado al dios Wiracocha. Durante la época colonial, los conquistadores españoles utilizaron piedras de los templos incas destruidos para levantar esta magnífica catedral.
Entre los años 1560 y 1664 se construyó la Basílica Catedral de esta ciudad. Su construcción fue confiada a Juan Miguel de Veramendi en 1560, quien fue sustituido dos años más tarde por Juan Correa. A éste le siguieron otros maestros, hasta que en 1615 se hizo cargo de la dirección de la obra Miguel Gutiérrez Sencio, un arquitecto seguidor de Marco Vitruvio y Jacopo Vignola, y admirador del estilo sobrio y puro instaurado por Juan de Herrera en El Monasterio de El Escorial. Bajo su dirección, se culminó la catedral del Cusco en 1649.
El material constructivo fue la piedra procedente de áreas cercanas y también se reutilizaron bloques de granito de color rojo desde la fortaleza conocida como Sacsayhuamán. Fue reconocida como Basílica menor de la Iglesia Católica, el 8 de febrero de 1928.
La construcción, de tres naves, se levanta sobre una planta de tipo salón. Un detalle que sorprende es la fusión entre el orden de los capiteles y frisos y el tipo de cubierta utilizado la bóveda de crucería, característica del gótico. Ello da pie a una sorprendente amalgama de estilos, frecuente en el estilo Barroco de Latinoamérica.
Una Joya de la Arquitectura Colonial
La Catedral del Cusco es un ejemplo impresionante de la arquitectura colonial peruana. Su fachada imponente combina elementos renacentistas, barrocos y góticos, creando una apariencia majestuosa y grandiosa. Los detalles ornamentales tallados en piedra capturan la atención de los visitantes, quienes quedan fascinados por la exquisitez de su diseño.
Tesoros en su Interior
Al ingresar a la Catedral del Cusco, te encontrarás con una riqueza artística y religiosa que te transportará a través de los siglos. Sus capillas laterales albergan una impresionante colección de pinturas y esculturas de la época colonial, con obras maestras que representan momentos clave de la historia religiosa del Perú. Destacan las series pictóricas que relatan la vida de Jesús y los santos, mostrando la maestría de los artistas de la época.
Un Santuario de Fe y Devoción
La Catedral del Cusco sigue siendo un importante centro de devoción católica en la región. Sus fieles acuden a diario para rendir homenaje a sus santos patronos y participar en las ceremonias religiosas. La atmósfera serena y espiritual de este lugar invita a la reflexión y a la conexión con lo divino.
Un Legado Cultural y Turístico
La Catedral del Cusco no solo es un lugar de importancia religiosa, sino también un destino turístico imperdible. Su valor histórico y cultural la convierten en un punto destacado en cualquier itinerario de viaje por la ciudad. Los visitantes tienen la oportunidad de conocer de cerca la influencia de la colonización española y apreciar la fusión de culturas que se refleja en su arquitectura y arte.
Series pictóricas
En la época del obispo Mollinedo, la Catedral recibió sus mayores aportes decorativos, tanto en retablos como en pinturas ejecutadas por grandes maestros indígenas. El favorito del obispo fue Basilio Santa Cruz, autor de los grandes lienzos que decoran ambos brazos del crucero ejecutados entre 1691 y 1693. Se trata de ambiciosas composiciones barrocas que desarrollan alegorías teológicas o las devociones promovidas por la Contrarreforma. Entre las más notables figuran «La imposición de la Casulla a San Ildefonso» y «El milagro de San Isidro Labrador». Del rival de Santa Cruz, Diego Quispe Tito, es la no menos célebre serie del Zodíaco, terminada en 1681, que se guarda hoy en la capilla de la Platería. Es una obra de madurez que muestra la enorme destreza técnica del maestro y su adaptación a los modelos compositivos y el colorido de procedencia flamenca.
Algunos de los pilares centrales exhiben pinturas de otro artista indígena, Antonio Sinchi Roca, un descendiente de la nobleza incaica oriundo de Maras. Sus cuadros representan a los evangelistas, profetas y reyes de Israel.
La mayor empresa pictórica del siglo XVIII son los cincuenta lienzos sobre las Letanías Lauretanas que ejecutó en 1755 el maestro Marcos Zapata. Estos lienzos decoran toda la parte alta de la Catedral, cubriendo los netos de los arcos tanto de las naves laterales como de la sacristía. Sus convenciones formales y la predilección por los colores rojos y azules son características del estilo de Zapata, que ejerció gran influencia en la región.
Precio de Ingreso
Si estás planeando visitar la Catedral del Cusco. Es recomendable verificar los horarios de apertura y cierre, así como las restricciones actuales debido a eventos religiosos o trabajos de conservación.La entrada a la catedral tiene un costo:
- Ingreso a la Catedral S/. 25.00
- Niños y estudiantes tiene descuento del 50% en los ingresos.
Un Tesoro que Debes Explorar
En resumen, la Catedral del Cusco es una maravilla arquitectónica y religiosa que merece ser descubierta. Su historia, su belleza arquitectónica y su riqueza artística la convierten en un destino imperdible para los amantes de la cultura y la historia. No importa si eres un devoto religioso, un entusiasta del arte o simplemente un viajero curioso, la Catedral del Cusco te invita a sumergirte en su magnificencia y a dejarte llevar por la esencia de siglos pasados. ¡No pierdas la oportunidad de explorar este tesoro histórico en tu próxima visita a la ciudad del Cusco!